From source code control to GitHub, the worldwide programming center.

The days of having to manually manage a project’s code security copies, which required personnel who would commit fully to the integrity of the data and making sure it was safe, are gone.

The first source code control systems, VCS and on, were limited to managing the file’s attributes to identify their modification dates and make copies of each of the versions, as well as the way in which they’d work with them.

Over time all of these systems have evolved and been refined, to offer a more complete set of tools needed for programming tasks, like a file changes comparator – a key feature to “track” errors and figure out when they were made and why.

Nowadays we have several ways to fulfill needs in the broad field of programming, including free platforms that offer an endless list of possibilities.

We can currently say, with authenticity, that GitHub is the worldwide programming center. A project that began in an office in the San Francisco Valley back in 2008. To get an idea of this platform’s magnitude, it has more than 9 million members and more than 200 million hits per month, and is currently valued at 2,000 million dollars.

And it really is no wonder. It offers a simple but highly effective system to keep track of the versions of the files that make up a project.

Public repositories, the collaborative strength of the new era.

Imagine 20 million public repositories available to anyone who has created an account on GitHub, being able to search, “adopt”, modify and even “fork” it’s projects… but what does all of this mean in layman’s terms? We can access a project published in a public repository with a single click. We can download that project right now to our development environment, and add our modifications, adapting it to our needs while having 90% of the work already done.github_asoapp

To fork? Well yes, fork could be defined as modifying the way in which a system or platform works, as well as its aesthetics, basing ourselves in the basic operation of an earlier one which performed the same task. By this we mean that we could take a management public application designed for the dealer of vehicles brand X, and modified its aesthetics to change it into a management platform for the dealer of the vehicle brand Y… simple right?

Operating it is fast and simple for us. After creating an account, we’ll be able to access all of the characteristics of this huge platform, which covers almost all of the projects developed in the world, both from independent developers as well as teams of all sizes… including institutions such as the White House, Google, Facebook or Madrid’s City Hall.

If you can picture everything we’ve talked about, you’ll understand why we talk about GitHub as a “dream factory” in which the collaboration of public projects is the precursor for creating applications for all tastes and platforms, and given that this is all relatively recent, imagine what lies ahead.

2020-03-05T14:13:21+01:00

Del control de código fuente a GitHub, el centro de la programación a nivel mundial.

Lejos queda el día en que había que gestionar a mano las copias de seguridad del código de un proyecto, siendo necesario personal plenamente dedicado a la integridad de los datos y ponerlos a buen recaudo.

Los primeros sistemas de control de código fuente, VCS en adelante, se limitaban a gestionar los atributos de los ficheros para identificar fechas de modificación y realizar las copias de las versiones de cada uno de ellos, así como el modo en el que se trabajaría con los mismos.

Con el tiempo todos estos sistemas han ido evolucionando y perfeccionándose, para ofrecer una colección más completa de herramientas necesarias para las tareas propias de la programación, como podría ser un comparador de cambios entre ficheros, una utilidad clave para “tracear” errores y averiguar en qué momento se cometieron y por qué.

Hoy, tenemos a disposición multitud de posibilidades para cubrir las necesidades en este amplio campo de la programación, incluso plataformas gratuitas que ofrecen un catálogo interminable de posibilidades.

En la actualidad, sin duda podemos afirmar sin miedo a equivocarnos que GitHub es el centro de la programación a nivel mundial. Un proyecto que comenzó en una oficina del Valle de San Francisco en el año 2008. Para que nos hagamos una idea de la magnitud de la susodicha plataforma, cuenta con más de 9 millones de miembros y más de 200 millones de visitas al mes, valorada hoy en 2.000 millones de dólares.

Realmente no es para menos. Ofrece un sistema sencillo pero enormemente eficaz para llevar un control de versiones de los fichero que forman parte del proyecto.

Los repositorios públicos, la fuerza colaborativa de la nueva era.

Imaginad 20 millones de repositorios públicos a disposición de cualquiera que simplemente cree una cuenta en GitHub, pudiendo buscar, “adoptar”, modificar e incluso “forkear”… ¿pero qué significa todo esto en el idioma de Cervantes? Nosotros mismos podemos hacernos con un proyecto publicado en un repositorio público con un click. En ese instante ese proyecto podemos descargarlo a nuestro entorno de desarrollo y añadirle nuestras modificaciones, adaptando el mismo a nuestras necesidades con el 90% del trabajo hecho.github_asoapp

¿Forkearlo?, pues sí, un fork se podría definir a modificar la forma de trabajar y la estética completa de un sistema o plataforma, basándonos en el funcionamiento básico de una anterior que cubría el mismo cometido. Con esto queremos decir que podríamos coger una aplicación pública creada para la gestión del concesionario de vehículos de la marca X, y modificando su estética convertirlo en la plataforma de gestión del concesionario de la marca Y… ¿sencillo verdad?.

Ponerlo en funcionamiento para nosotros es rápido y sencillo, creamos una cuenta y dispondremos de todas las características propias de esta enorme plataforma que copa casi la totalidad de proyectos desarrollados en todo el mundo, tanto de desarrolladores independientes como de equipos de trabajo de todos los tamaños… pasando por instituciones como la Casa Blanca, Google, Facebook o el Ayuntamiento de Madrid.

Si os habéis hecho una imagen de todo lo que hemos hablado, comprenderéis que nos refiramos a GitHub como una “fábrica de sueños” en los que la colaboración de proyectos públicos es el precursor para la creación de aplicaciones para todos los gustos y plataformas, y teniendo en cuenta de que todo esto es relativamente reciente, imaginad lo que nos depara el futuro.

2020-03-05T12:37:10+01:00
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