De un tiempo a esta parte, las plataformas híbridas han ido creciendo en el mercado a medida que mejoraba su rendimiento. Con unos principios duros, las webapps, no eran más que páginas web responsivas que eran capaces de adaptar su interfaz al uso de una pequeña pantalla.

Afortunadamente todo esto quedó atrás y las transiciones a trompicones y las transiciones inexistentes han dejado paso a un diseño bien cuidado con unos resultados muy respetables.

Ionic

Es un SDK de código abierto basado en Angular2 y Apache Cordova. Desarrollado con jQuery Mobil y Bootstrap, es la más utilizada en el mercado de las apps híbridas. Son completamente compatibles con la publicación en la tienda de aplicaciones de la plataforma destino correspondiente.

De las plataformas híbridas es la más trabjada. Sus funciones son más avanzadas y el aspecto final de las aplicaciones mucho más limpio. Hace uso de TypeScript, un lenguaje tipado producto de Microsoft, derivado del JavaScript pero que hace uso de objetos de clase.

Phonegap

Más rudimentario, no emplea herramientas propias y se queda con JavaScript para el backend,  y HTML+CSS3 para la parte presentación o frontend. No menos potente, es la mejor alternativa a Ionic en cuanto a plataformas híbridas con buenos resultados.

Es la más cercana a Apache Crodova, de hecho las diferencian únicamente en que Phonegap cuenta con funciones de computación en la nube proporcionada por Adobe Creative Cloud.

En definitiva, dos frameworks muy similares que se apoyan en lagran potencia del motor HTML con el que cuentan los terminales de última generación y que desde luego obtienen unos resultados que hacen titubear decantarse por la opción de las aplicaciones nativas.

Aun así, siempre seguirán siendo la opción B frente a las aplicaciones nativas de cada plataforma.